Las mujeres y la importancia en la agricultura familiar Campesina e Indígena.
Guatemala ha asumido compromisos de impulsar acciones a favor de eliminar las desigualdades de género, que son resultado de múltiples discriminaciones y violencias basadas principalmente en el sexo, identidad étnica y la clase social. En Guatemala las mujeres rurales enfrentan con particularidad el ser indígenas y empobrecidas. Los ODS y el decenio de la Agricultura familiar Campesina e Indígena, orientan a los Estados para enfocar las estrategias que permiten dar prioridad a las acciones de las mujeres rurales.
La Agricultura familiar indígena y campesina forma parte de la vida cotidiana de las mujeres, los huertos familiares permiten contar con hierbas, legumbres y frutas, los espacios para crianza de animales forman parte de los sistemas de soberanía alimentaria, a la vez es estratégico para las mujeres, ya que con los excedentes se complementan las necesidades básicas de la vida como la salud, educación y compra de insumos para la limpieza y el cuidado de las casas.

La agricultura familiar Campesina e Indígena “es un tejido de relaciones con la tierra y la vida, por eso las mujeres exigimos que se incluya en los programas de gobierno el acceso a los recursos para producir” entrevista con lidereza rural y campesina.
En el MAGA por cuatro años (2015-2018) la actividad incentivos económicos y/o apoyo a grupos de mujeres para el establecimiento de actividades productivas, tuvo como objetivo
brindar apoyo a las mujeres agricultoras a través de proyectos productivos, los recursos institucionales del año 2015 al 2018 asignaron Q13.23 millones específicamente para ser ejecutados por organizaciones de mujeres, a través de incentivos económicos, de ese total se ejecutó CERO. Para el año 2019 la actividad desapareció de la estructura presupuestaria.

Para el año 2020 el MAGA informa que el presupuesto destinado a las mujeres se encuentra en la actividad “apoyo al mejoramiento del hogar rural”, esta actividad está dirigida a el pago del extensionismo rural, encaminado a las mujeres madres del hogar rural, con el objetivo de capacitar a las mujeres madres, con actividades sobre el aprovechamiento de los alimentos, recetas de cocina, lavado de manos y otras relacionados al cuidado de la familia, dichas prácticas fortalecen el papel de las mujeres madres, sin fortalecer a las mujeres como sujetas con derechos y de manera integral.
La respuesta institucional ha sido asignar recursos a la actividad apoyo al mejoramiento del hogar rural, como se observa en la tabla 8, del año 2016 al 30 de junio del 2020 el presupuesto vigente es de Q230.47 millones con una ejecución del 80.26%.

La actividad hogar rural se encuentra en la estructura programática “apoyo a la Agricultura Familiar Campesina e Indígena, en el 2016 el ministerio cuantifica haber capacitado a 123,400 mujeres, en el 2017 a 138,999, en el 2018 el total reportado es de 131,819 y en el 2019 vuelve a incrementar a 146,733 mujeres, esta atención es a nivel nacional.
Considerando que el país tiene un total de 340 municipios, en promedio el ministerio estaría acompañando a 400 mujeres por municipio. Este acompañamiento continúa siendo limitado, sin impactos en la vida de las mujeres y fuertemente cuestionado por las organizaciones de mujeres.

El ministerio de agricultura construyó la Política Institucional para la Igualdad de Género
y Marco Estratégico de Implementación 2014-2023. “Las mujeres construimos la historia desde las propuestas locales e incluyentes, es por esto que consideramos que el ministerio no ha querido incorporar conceptos como la soberanía alimentaria, porque esto sería un cambio de pensamiento estructural, es la posibilidad de una distribución más equitativa de la tierra y lo que consumimos” entrevista a lidereza rural y campesina.
Las mujeres ante la falta de respuesta del ministerio de agricultura relacionado al acompañamiento y el apoyo a los proyectos dirigidos a las mujeres, como contrapropuesta han construido la propuesta de Ley de Desarrollo Económico Para Las Mujeres mejor conocida como LeyDEM.
INFORME DE PAÍS: Propuestas territoriales, respuesta para la soberanía alimentaria
